Viejos tiempos, la ideología pervive.

Como nos enseñaba Marx la historia es un circulo cada vez mas pequeño, y todas las situaciones o crisis se van repitiendo una y otra vez, justo hasta que el modelo capitalista,se devore a si mismo, ese momento se va acercando, puede ser que mas pronto que tarde el consumismo y el libre mercado que ha demostrado ser un fracaso dejaran paso la economía y modo de producción sindicalista, pues incluso los tradicionales países del tercer mundo, esos que hasta la fecha están siendo explotados inexorablemente van adquiriendo conciencia y van despertando.

Pero este cambio es responsabilidad de los partidos de izquierdas, de los socialistas, así fueron los viejos tiempos, aquellos en los el simple hecho de ser sospechoso de militancia te conducía las mas de las veces a perder el trabajo, suspender los estudios e incluso en muchos casos la cárcel.

La entrega en defensa de los oprimidos, de la clase trabajadora, de los débiles era la única meta para aquellos dirigentes de antaño, al contrario que la socialdemocracia alemana el socialismo español amparaba ideas mas revolucionarias, lo hacia porque sus cuadros eran un ejemplo de pluralidad, donde un impresor podía llegar a ser secretario general, o un sindicalista Presidente de Gobierno, eso si la ideología, su ideología que los hermanaba con los de su clase era en cierto modo Marxista, Pablo Iglesias, Largo Caballero, Besteiro, Fernando de los Ríos, Prieto, nombres que para muchos de esos que hoy se dicen progresistas no suenan, los desconocen, y si suenan es simplemente por haberlos oído en las casas de pueblo y es que aquella ideología ni es ni se parece a la actual, que ha sido sustituida no se sabe muy bien por cual otra.

Puede que la composición de los cuadros dirigentes tenga algo que ver con ello, y digo puede porque el modelo de social democracia alemana, aquella de Willy Brant, aquel que admiraba cierto Secretario General, que si, en un determinado momento realizo el milagro de hacerle ganar unas elecciones, pero sin olvidar que la derecha había descarrilado, entonces se pudo y no se hizo la revolución, aun es mas simplemente se aprobaron unas medidas que el tiempo ha ido desmoronando una por una, y es que el sistema bipartidista esta muy arraigado en la Europa central, pero en la plural España cada español es en si mismo un partido de izquierdas o de derechas, de ahí su fracaso, si, los cuadros de la social democracia lo componen los profesionales de la política, gentes que pasan de las juventudes al partido, como meros aprendices de un oficio, una nueva casta, un partido que pretende defender a los obreros sin los obreros, ?que obrero puede confiar en un partido de izquierdas donde la representación obrera huelga en ausencia?

Si viejos tiempos, viejas ideologías, pero ni Marx ni Pablo Iglesias estaban equivocados, son otros los que anteponiendo sus intereses al interés del pueblo los que se equivocan, y ocurre que los obreros sin lideres no luchan, no van a la huelga se conforman con su lastimosa suerte, y no votan, no es la derecha la que obtiene el triunfo, jamas, es la descafeinada izquierda, esa que busca en un pasillo que se dice de centro los votos, ignorando como alguien dijo que en ese pasillo las puertas solo se abren a la derecha, la que al olvidar su ideología pierde, basta un solo hombre, una sola mujer que enarbole la idea ahora caida, pero aun viva y asi poder convenciendo vencer.