Ser ratón o ser cola de león.

Compañero, nadie, ninguno de todos nosotros podemos ni por un solo instante reprochar a los militantes de base, a esos eternos olvidados de la mil pequeñas agrupaciones locales de nuestros pueblos y aldeas del País Valenciano que no se lanzaran las pasadas elecciones a la lucha mas intensa, sin titubear, aun a sabiendas que lo harían solos, tal y conforme les habían dejado desde Blanquerias y desde la provincial, lo hicieron, y perdieron, perdimos, y ahora la desesperanza y el desanimo cunde entre ellos, entre nosotros cuando vemos como lo que esos militantes, esas bases aprobaron en el 12ª Congreso se va a pique, lo hace como un navío a falta de un comandante, de un piloto, de un contramaestre que les guié, y todo porque esos que podrían haber cambiado la historia, el futuro del PSPV simplemente se han manchado al transigir y ceder en todo por unas razones que ellos ha dado en llamar practicas, unas razones a las que yo llamo miedo, y es que para muchos es preferible ser cola de león que cabeza de ratón, yo y muchos como yo apostamos un 31 de marzo a ser ratones, a ser libres, a decidir por nosotros, a ser y hacer País Valenciano, pero ya se sabe el león mata con el rabo a los ratones.