No es fe lo que se necesita.

En toda confrontación dialéctica, en todo debate ideológico,de la izquierda que quede meridianamente claro, pues en la derecha eso es desconocido, tanto que ni siquiera existe, siempre hay un vencedor y un vencido, pero no por ello se debe de segur practicando esa táctica, esos métodos heredados en el PSOE desde1979, aquel en el que se impuso el simple electoralismo, la conquista del poder al precio que fuera, sobre la ideología socialista, si, se desprendieron de su camisa roja, y se sacudieron el polvo rojo de España, ese que ni el General pudo barrer de estas tierras, fue suplantado por la corrupta social democracia alemana, la vendetta de los derrotados.

Si, estaremos todos de acuerdo que siempre hay dos caminos a elegir después de un congreso, la represión o la integración para compartir el destino, la simple dictadura de un secretario general y una ejecutiva a medida. o el crear un nuevo edificio aprovechando todos los calores. el viajar solo o el tender la mano generosa al caído,si siempre existe un nuevo camino si se tiene fe en ello.

La historia esta plagada de esos que eligieron edificar sus reinados, sus gobiernos sobre los huesos de los vencidos, jactanciosa venganza sobre aquellos que no les apoyaron o votaron, pero esa venganza como en las dictaduras es fruto del miedo, de la debilidad de esos lideres, que con ello creen o pretenden su destino, ponerlo en manos de nuevos y jóvenes pretorianos a cambio de buenas soldadas, simples mercenarios, así desde el minuto siguiente a la primera ejecución ponen la primera piedra de su propia perdición.

Esos profesionales de la política, no saben, nunca han sabido comprender que es el perdón, la reconciliación el verdadero camino, ved pues compañeros porque que ninguno de todos ellos nunca alcanzaron ni alcanzaran la gloria, solo les espera un homenaje, una losa, pesada, muy pesada, el escarnio de su fama y en el mejor de los casos el olvido, incluso el de los suyos mas próximos, la historia solo recuerda elevados en los altares marmóreos a aquellos de magnánimo corazón, los que acabada la batalla socorren a los heridos, y tomando posesión del reino eligen para su compañía en el gobierno los mas ilustres de los vencidos, así fue, así paso y hoy aun muchos lideres de la izquierda, demasiados singuen sin querer aprender.