Puede que la interpretación de lo que esta ocurriendo en la cúpula del PSOE , con esas declaraciones y sacrificios de los lideres mejor preparados para dirigir un nuevo proyecto, una nueva singladura, nazcan de un error, el error cometido por Zapatero cuando anuncio que se iba y unas primarias pues puede que en realidad la verdad sea que él no había pensado dejar Presidencia, ni la Secretaria General, pero los resultados electorales, el fracaso recogido a sido tal que le ha trastocado lo planeado.
En virtud de ello a cada minuto que pasa el escepticismo del pueblo español agranda a pasos agigantados la ya existente desconfianza ya no en las bases socialistas, si no en sus barones, en su ejecutiva, en su gobierno, en suma en Zapatero, en el que aprecian una inseguridad creciente derivada no de su falta de autoridad esa aun la mantiene , si no de su falta de ideología.
Es a partir de ese momento en el que ya no es el interés del partido el que queda menoscabado, si no el propio interés de los ciudadanos cuando se impone la necesidad de dar un paso adelante, al contrario de lo realizado por Carme Chacon, un paso adelante que lleva al partido socialista hacia un congreso, que puede moleste a las intenciones del actual aparato, pero que lo necesita el interés de España, el funcionamiento de la democracia requiere contar con partidos de amplia implantación y fuertes, y la propia debilidad del PSOE en estos momentos la esta cuestionando,
De nuevo la historia coloca al partido socialista en una encrucijada en la que se deberá elegir entre la reafirmación de los principios socialistas o el simple seguidismo de esas formas reformistas llevadas a cabo por el actual ejecutivo y que han conducido al partido a su atomización, y la elección del camino a tomar no puede ser a través de la elección de una simple persona. Si no de una verdadera transformación de la extructura y del proyecto socialista, y eso solo se pude hacer a través de un congreso,
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